Los problemas gastrointestinales son bastante comunes, pero a menudo no tienen una causa orgánica identificable. La mayoría de las personas con síntomas son diagnosticadas con trastornos gastrointestinales funcionales, como el síndrome del intestino irritable (SII), la dispepsia funcional o el estreñimiento funcional. Estas afecciones afectan a aproximadamente el 40 % de la población, y dos tercios de los pacientes presentan síntomas crónicos e intermitentes .
Si usted padece del Síndrome del Intestino Irritable (SII), sabe muy bien cómo esta condición puede afectar su vida diaria, interfiriendo en su calidad de vida, trabajo e incluso socialización, debido a los molestos síntomas y desafíos constantes.
¿Qué es el síndrome del intestino irritable?
El síndrome del intestino irritable (SII) es un trastorno intestinal funcional que causa dolor abdominal crónico o recurrente, acompañado de alteraciones en las deposiciones (diarrea, estreñimiento o ambos). Estos síntomas pueden mejorar o empeorar después de defecar .
El SII no es una entidad única; es un diagnóstico que abarca diferentes afecciones con síntomas similares, pero con causas diversas. Se estima que afecta a aproximadamente el 10 % de la población, siendo más común en mujeres y personas jóvenes.
¿Cuáles son los principales síntomas del SII?
El síntoma principal es el dolor abdominal, acompañado de cambios en la frecuencia o consistencia de las deposiciones. Dependiendo del patrón predominante, el SII puede manifestarse principalmente con diarrea, estreñimiento o una combinación de ambos (patrón mixto) 3 .
Causas del síndrome del intestino irritable
El SII es el resultado de una desregulación bidireccional en la comunicación entre el intestino y el cerebro. Diversos factores pueden ser la causa de esta afección, como la predisposición genética, las infecciones gastrointestinales, los desequilibrios en la microbiota intestinal (disbiosis), la inflamación leve y la respuesta inmunitaria alterada. Además, las alteraciones en la permeabilidad intestinal, el metabolismo de los ácidos biliares y la serotonina, los factores psicológicos, el estrés, la dieta y las influencias ambientales también pueden estar entre las causas y los factores de riesgo del SII .
El papel clave de la nutrición en el SII
La nutrición juega un papel esencial en el manejo del SII y debe ajustarse de forma individual, teniendo en cuenta los síntomas y la tolerancia de cada persona 4 .
El primer paso es garantizar que cada paciente reciba orientación nutricional personalizada, centrada en cambios estratégicos y sostenibles en sus hábitos alimentarios . A continuación, se presentan algunas recomendaciones esenciales:
1. Comidas equilibradas y regulares – Opte por comidas más pequeñas y frecuentes a lo largo del día, evitando largos periodos de ayuno o comer en exceso;
2. Moderación en el consumo de ciertos alimentos – Reducir la ingesta de cafeína, alcohol y alimentos picantes o ricos en grasas, que pueden empeorar los síntomas 4 ;
3. Un ambiente tranquilo durante las comidas – Comer en un espacio tranquilo, sin distracciones excesivas, ayuda a mejorar la digestión y la comunicación entre el intestino y el cerebro 4 ;
4. Ingesta adecuada de fibra : La fibra soluble, como la presente en la avena y el psyllium, puede ayudar a reducir el dolor abdominal y mejorar los síntomas del SII. Su introducción debe ser gradual para evitar molestias y supervisada para prevenir el riesgo de distensión abdominal. Por otro lado, la fibra insoluble, como el salvado de trigo, puede empeorar los síntomas, especialmente en personas con diarrea o distensión abdominal.<sup> 4 </sup>
5. Dieta baja en FODMAP : Para quienes continúan experimentando síntomas fuertes, una dieta baja en FODMAP, basada en la restricción temporal de carbohidratos fermentables, puede ser útil. Este enfoque ha demostrado ser eficaz para reducir el dolor abdominal, la hinchazón y las molestias intestinales.<sup> 4 </sup> Sin embargo, debido a su complejidad, debe ser supervisada por un nutricionista para prevenir deficiencias nutricionales y garantizar un plan personalizado y una reintroducción cuidadosa de los alimentos.
6. Gluten: ¿eliminar o no eliminar? – La exclusión del gluten solo debe considerarse en casos de sensibilidad al gluten no celíaca demostrada o en presencia de otros indicadores específicos. Para la mayoría de las personas con SII, no hay evidencia de que la exclusión del gluten ofrezca beneficios significativos.
Suplementos nutricionales para el SII
Algunos suplementos pueden ser aliados importantes en el manejo del Síndrome del Intestino Irritable, ayudando a restablecer el equilibrio del sistema digestivo y reducir los síntomas:
Probióticos – Ayudan a reequilibrar la microbiota intestinal , fortalecer la barrera intestinal y reducir la inflamación 5 .
Cáscara de psyllium : Una fibra soluble bien tolerada, regula el tránsito intestinal y promueve la salud de las mucosas 5 .
Vitamina D - Puede mejorar los síntomas gastrointestinales, fortaleciendo la integridad intestinal, reduciendo los marcadores inflamatorios y beneficiando el bienestar psicológico 5 .
Glutamina - Posee propiedades regenerativas, antiinflamatorias e inmunomoduladoras de la mucosa intestinal6 , especialmente cuando se combina con estrategias como una dieta baja en FODMAP7 .
Al integrarse de forma personalizada, estos suplementos permiten un enfoque más completo y efectivo, centrado no solo en aliviar los síntomas, sino también en restablecer el equilibrio y la salud intestinal.
Enfoque multidisciplinario
En el manejo del SII, el enfoque más eficaz no consiste en soluciones aisladas, sino en un enfoque integral. Los estudios demuestran que los mejores resultados se obtienen cuando la medicina se combina con la nutrición, la psicología y, cuando sea necesario, la fisioterapia, todo ello adaptado a las necesidades específicas de cada persona .
Estrategias como las dietas bajas en FODMAP, la psicoterapia centrada en el intestino y los enfoques cognitivo-conductuales tienen un impacto clínico significativo cuando se aplican de forma personalizada.9 La ciencia es clara: este enfoque multidisciplinario no solo reduce los síntomas, sino que mejora el bienestar psicológico y la calidad de vida de una manera más duradera y rentable.
La clave es tratar a la persona, no solo el intestino. Si tienes síndrome del intestino irritable y no sabes por dónde empezar, programa tu consulta de nutrición funcional en Bioself y da el primer paso para recuperar tu salud y bienestar.
Leer más contenido de Bioself
¿Te gustó este artículo? ¡Lee el resto del contenido que hemos preparado para ti en el blog de Bioself ! Allí encontrarás recetas para probar en casa, además de información sobre salud y bienestar. ¡Que lo disfrutes!
Referências
Aviso legal
Este artículo no pretende diagnosticar, tratar ni sustituir el consejo médico; su contenido es solo informativo. Consulte con un médico o profesional de la salud sobre cualquier diagnóstico médico relacionado con su salud o cualquier opción de tratamiento. Las afirmaciones sobre productos específicos que se hacen en este artículo no están aprobadas para diagnosticar, tratar, curar ni prevenir ninguna enfermedad.